Introducción
Agradezco a la Academia Boliviana de LIJ, por brindarme
la oportunidad y el honor de compartir con ustedes en este Seminario virtual
conmemorando el centenario del nacimiento de uno de los principales escritores
de Latinoamérica, gestor y promotor de la literatura infantil en Bolivia.
Oscar Alfaro, como Carlota Carvallo en Perú, son las
figuras más descollantes de la naciente categoría literaria denominada
literatura infantil, en un principio vinculada en Perú y en Bolivia a la pedagogía,
como un género menor, que los críticos literarios relegaban en las páginas de
los diarios.
No se entendía entonces que la literatura es única y las clasificaciones usuales de literatura
europea, americana, de la conquista, femenina, infantil o juvenil, son
cuestiones que tienen que ver con el lector.
Los fines de la literatura son pues los mismos en todos los casos: el deleite espiritual y el goce estético, fiesta de los sentidos, juego excelso, vuelo de la fantasía y exaltación de sentimientos.
La literatura infantil en el presente, dado su vasto público lector, ha venido a convertirse en una categoría tan importante como cualquier otra que comprende la creación literaria de un país, de un continente, de una etapa histórica o social. Nadie puede negar ahora que la literatura infantil es un sentimiento, una expresión que fermenta y se multiplica en los confines del mundo.
Oscar Alfaro nació
en 1921, inicio de la década en la que surge el Derecho de Menores con la Declaración
de Ginebra de 1923, la Psicología Infantil con Jean Piaget y se profundizan los
estudios sobre pedagogía, con los trabajos de Ausubel y Vigotski, por lo que
suelo decir que el niño es un invento
del siglo XX.
En esta década maravillosa en el Perú, la escritora Alida
Elguera publica el primer libro de cuentos expresamente escrito para niños Juguetes
(1929), iniciativa que desinhibe a otros escritores como Angélica Palma que
publica Contando cuentos (1930), Luis Valle Goicochea Las
canciones de Rinono y Papagil (1932), Abraham Arias Larreta Rayuelo
(1938) y otros pioneros de la LI, como en Bolivia: Antonio Díaz Villamil, Beatriz Schulze Arana,
Elda de Cárdenas, Yolanda Bedregal, Hugo Molina Viaña y Alberto Guerra Gutiérrez.
A varios de estos insignes escritores bolivianos tuve la
suerte de conocer, cuyas obras afectuosamente dedicadas, son joyas que guardo
con orgullo en mi biblioteca, así como los libros del escritor homenajeado
Oscar Alfaro, que su esposa Fanny Mendizábal, quien prolongó con devoción y
amor la presencia cultural de su esposo, me obsequió algunos de sus bellos libros.
El universo fantástico de Carlota Carvallo de Núñez
Carlota Carvallo de Núñez (1909-1980) fue la
escritora más prolífica y vigorosa de la literatura infantil peruana. Le
correspondió, junto con Francisco Izquierdo Ríos (1910-1981), sentar las bases
pedagógico-literarias de la literatura infantil.
Cota, como le llamaban cariñosamente, ocupa
lugar cimero en el panorama de la literatura infantil, tanto por la calidad de
su obra como por la autenticidad de sus personajes, extraídos del alma popular,
del universo andino y costeño, de las raíces mismas del folklore, como por la
sencillez de su lenguaje exquisitamente literario.
No conocí personalmente a Carlota Carvallo,
pero desde niño, mi espíritu se nutrió con su obra literaria a través del libro
Rutsí,
el pequeño alucinado (1947), que distribuía gratuitamente el Ministerio
de Educación Pública en las escuelas estatales. Con esta obra que narra las
aventuras de un geniecillo selvático, Cota Carvallo obtiene el primer puesto en
el Segundo Concurso Literario Latinoamericano que el año 1942 organizó la
editorial Farrar & Rinehart de Nueva York.
Tiempo después llegaría a mis manos El pájaro niño, publicado por la editorial de Juan Mejía Baca (1958), libro ganador del concurso de literatura infantil convocado por el diario El Comercio, que compila diez cuentos agrupados bajo los títulos: Cuentos del mar, El tiempo en los cuentos, Los animales maravillosos y La música en el cuento.
La Apacible Caleta de su
Infancia
Carlota
Carvallo Wallstein nació en Lima el 26 de junio de 1909. Fue hija de don
Armando Carvallo Argüelles, peruano de ascendencia portuguesa, y de doña
Eugenia Wallstein Müller, de nacionalidad húngara. La bautizaron con el nombre de
Carlota Clara en honor de sus dos abuelas. Reside en Huacho hasta los
diecisiete años de edad. En esta ciudad costera, ubicada doscientos kilómetros
al norte de Lima, recibe sus primeras lecciones de música y pintura, que cultivó
el resto de su vida. Huacho por entonces, era una apacible aldea que divisaba
el mar donde en las playas de Carquín y Végueta, pescadores artesanales tendían
redes que platinaban en las noches, repletos de peces de diversa especie:
La
niñita linda
se
quedó dormida,
una
mañanita
muy cerca del mar.}
¡Cállense las olas,
dejen de bramar,
que la niña linda
se puede asustar!
¡Que se calle el viento,
deje de soplar,
que la niña linda
dormidita está!
Callen las gaviotas,
dejen de graznar,
que la niña linda
se va a despertar!
(La niña y el mar)
En los artículos publicados por la autora en la
revista Urpi, en repetidas oportunidades relata su experiencia de vida en el
apacible pueblo costero colindante con las pródigas campiñas de Hualmay, así
como sus paseos a pie y a caballo y las tradiciones orales que le contaban los
pobladores.
Su esposo, don Estuardo Núñez, secretario de la
Academia Peruana de la Lengua, dice en el prólogo de la Biobibliografía de Carlota
Carvallo 1909-1980: “Sólo hizo algunos (años) de escuela primaria y dos
o tres años de media, de modo un tanto informal, pues ella prefirió estudiar
atendiendo a la vida, a los hombres en sociedad y leyendo libros de literatura
y de historia que encontró en su hogar. Logró así una formación autodidacta”
(Carvallo de Núñez, 1990, p. 11)
Durante ese período de su vida, como hija de una familia instruida y hábil en idiomas extranjeros como inglés, alemán y un poco de francés, lee a Andersen, los hermanos Grimm y a Julio Verne, así como mitología griega y literatura moderna. Su formación autodidacta, se nutrió pues de importantes libros que leyó en su adolescencia.
Dos Caminos Paralelos: la
Pintura y la Literatura
A los 17 años de edad, el año 1926, se
establece en Lima con su familia y se matricula en la Escuela Nacional de
Bellas Artes donde fue alumna de los maestros Daniel Hernández y José Sabogal.
Se gradúa como pintora con los mayores honores, el año 1932. Desde entonces
ocupó un alto sitial en el ejercicio de la plástica, siendo galardonada en 1952
con el Gran Premio Nacional “Ignacio Merino”.
En cuanto a su otra pasión, la literatura,
mientras Carlota orientaba su vocación artística estudiando pintura, utilizando
su pericia de dibujante comenzó a introducirse en el mundo periodístico.
Establecida en Lima, entre los 18 a 25 años, Carlota ejerce como dibujante en
las revistas "Semanal", "El Hombre de la Calle" y "Limeña".
En esa época desarrolla con mayor intensidad su actividad literaria. En la
década del setenta dirige la revista Urpi
(1974-1975), suplemento semanal del diario La Prensa, una de las revistas para
niños más importante publicada en el país. Luego dirige la revista literaria de
los amigos del arte, Alpha.
Carlota Carvallo, personalidad de actividades
múltiples ejerció también la docencia, desempeñándose en los colegios María
Alvarado, Sagrados Corazones de Belén, San Jorge y Prescott, entidades
educativas donde comparte con estudiantes que valoran su obra literaria y
alientan su infatigable labor creativa.
El Matrimonio y los Hijos
El 27 de diciembre de 1934, a los 25 años de
edad, contrajo matrimonio con el escritor Estuardo Núñez. Fueron testigos del
matrimonio el pintor José Sabogal y el educador José Antonio Encinas.
Tuvo siete hijos (cinco varones y dos mujeres),
importante motivo de inspiración de su obra literaria: poesía, cuento y teatro,
todo con destinatario a la niñez que tanto amó y a la que orientó siempre su
potencial creativo. En esa época, el niño todavía era concebido como un adulto
pequeño, la psicología infantil hacía pinitos, el derecho de menores era una
utopía y la literatura infantil, consecuentemente, estaba más relacionada con
la didáctica que con la literatura.
Libros para los hijos y los
hijos de sus hijos
Carlota
Carvallo de Núñez fue un espíritu inquieto, emprendedor y sensible a todas las
formas del arte y la literatura; la destinataria predominante de su obra
literaria fue siempre la infancia, luego la juventud. Explotó la magia y la
fantasía de los mundos andino, selvático y costeño, sin descuidar la
interpretación de la realidad peruana que se refleja en sus narraciones, que
hacen gala de su profundo conocimiento e identificación con el Perú en toda su
extensión, razas y cultura, que se rebela en Rutsí, el pequeño alucinado,
El
pájaro niño, Oshta y el duende, Cuentos
fantásticos, El Amaru y otros cuentos del Perú, entre
otros libros.
Es importante destacar la publicación de las obras de teatro El niño de cristal. (1955). La tacita de plata (1955). Florisel (1959) y Piezas de teatro escolar (1972).
Carlota Carvallo de Núñez con sus obras de
teatro, poemas, cuentos y cantos, desde el año 1947 cuando publica la novela Rutsí,
el pequeño alucinado, hasta sus últimos días, fue la principal
animadora de publicaciones, instituciones y movimientos culturales que tenían
que ver con la literatura infantil.
Fundó en 1974 la revista Urpi, suplemento infantil
del diario La Prensa, donde publica cuentos, poemas y artículos sobre lugares
turísticos del país. Esta revista es considerada como la mejor publicación para
niños de todos los tiempos. Se publicaron 47 números.
Carlota Carvallo fue también subdirectora de la
revista Alpha, de la Asociación de Amigos del Arte.
Participa en la Campaña por una buena lectura para el niño, en Buenos Aires (1964);
en el IX Congreso Internacional del Libro Juvenil en Madrid, donde asume la presidencia de la Sección Peruana de IBBY,
y en el X Congreso Internacional de la
IBBY en Lubjana (Yugoslavia) en 1966.
Interviene como jurado del Premio Internacional Hans Christian Andersen, en París, en 1967; en la Bienal de Ilustraciones para Niños (Bratislava 1971) y en el Concurso Juan Volatín, auspiciado por la Municipalidad de San Isidro en 1969.
Conceptualizando la Literatura Infantil
A Carlota Carvallo le toca vivir en una época
en la que todavía no estaba claro el concepto de niño, considerado entonces
como un adulto en pequeño, pese a que ya se había aprobado la Declaración de
los Derechos del Niño el año 1959, casi una década anterior a su discurso. La
literatura infantil vinculada a la pedagogía y con marcada orientación
moralista, era todavía incipiente. Había pocos autores y las ediciones eran
modestas y de escaso tiraje. Los lectores por lo general eran personas
relacionadas con la educación y la literatura y a través de ellos llegaban los
libros a un reducido público infantil.
Carlota Carvallo de Núñez escribió literatura
infantil cuando ésta era considerada inferior a la literatura “seria”, la que
era dirigida para adultos”. (García
Padrino, 2010, p.238).
“Cuando escribió Rutsí en 1942, la situación de
la literatura infantil en el Perú era triste. La única librería existente solo
mostraba para niños, traducciones de obras clásicas extranjeras, sin temas,
ambientes ni personajes apropiados para desarrollar en el niño una mejor
comprensión de su realidad y herencia Cultural”. (Heflin, 1991, pp. 166-167).
En la década del sesenta, el Consejo Nacional
de Menores invitó a la escritora Carlota Carvallo de Núñez para desarrollar el
tema El
papel de la literatura Infantil, texto que se publicó en el volumen 9
de la misma serie. Este ensayo es de suma importancia, toda vez que permite
conocer su opinión sobre la literatura infantil, un tema todavía en proceso de
maduración por los estudiosos de la época.
A continuación, algunas glosas textuales:
“La literatura infantil desempeña un papel muy
importante en la formación cultural y moral de la infancia. (Carvallo de Núñez, 1967, p. 1)
“Los escritores tratan en la actualidad de
penetrar en el mundo de los niños estudiando su lenguaje y su psicología y a
menudo recurren a los recuerdos de la propia infancia para crear una auténtica
literatura infantil”. (Carvallo de Núñez, 1967, p. 1).
“Durante los primeros años de vida, al niño le
gusta jugar con palabras que todavía no entiende, de allí el éxito de las
canciones de cuna, rondas y pequeñas poesías con las que se suele entretener a
los niños. (Carvallo de Núñez, 1967, p. 6).
“Escribir para los niños es penetrar en su
mundo maravilloso…Es ponerse al nivel espiritual del niño para lo cual hay que
asumir una actitud de completa inocencia y deslumbramiento ante el universo,
como si lo contempláramos por primera vez…” (Carvallo de Núñez, 1967, p. 8).
“¡Quien escribe un cuento para niños debe tener
algo de poeta, porque solo al artista y al niño les es dado contemplar las
cosas viejas con los ojos nuevos!” (Carvallo de Núñez, 1967, p. 9).
“Las lecturas que se ponen en manos de los niños
tienen una gran influencia en su vida futura. Las enseñanzas morales o
estéticas que de ellas se desprendan, quedarán hondamente gravadas en su
espíritu. Pero debemos procurar al mismo tiempo que no se haga demasiado
evidente esa intención moralizadora o didáctica porque los niños saben muy
pronto descubrirla” (Carvallo de Núñez, 1967, p. 10)
“El cuento infantil ha de ser ágil y ameno.
Debe encausar la imaginación e inclinar la sensibilidad hacia las cosas bellas.
Inculcar comprensión y amor hacia la humanidad y los pequeños seres que nos
rodean”. (Carvallo de Núñez, 1967, p. 10)
En una entrevista efectuada por el diario El
Comercio, Carlota Carvallo expresa su filosofía acerca de la importancia de la
literatura infantil autóctona. Dice que los héroes que alimentan la fantasía
del niño deben surgir de su propio ambiente y no de literaturas extranjeras. El
arquetipo que hay que imitar, el héroe que debemos admirar, todos aquellos
personajes que nos son más tarde tan familiares y queridos, deben surgir de
nuestra historia.
En el ensayo El papel de la literatura
infantil, Carlota Carvallo destaca también la importancia del folklore, rica
fuente de inspiración y propicio material literario que contribuye al
fortalecimiento de la identidad cultural de los niños:
“Miremos en torno nuestro y descubriremos
belleza en lo que nos rodea. Y así surgirán otros personajes para los niños. E
inspirémonos en la realidad, porque el cuento, como toda creación del hombre
debe tener sus raíces en la vida misma”.
(Carvallo de Núñez, 1967, p. 13)
“En el folklore se encuentran valiosos
elementos para la literatura infantil… De esta etapa primitiva del hombre
surgen los mitos y leyendas cargados de símbolos y elementos mágicos que le son
propios a todos los pueblos”. (Carvallo de Núñez, 1967, p. 16)
Más adelante recomienda mirar nuestro entorno
donde descubriremos belleza en lo que nos rodea. Por qué no hablar de lo
nuestro, dice, la historia, la naturaleza, el tucán y el gallinazo, del molle,
el algarrobo, la cantuta y el amancay.
Concluye
el ensayo reseñando los libros para niños escritos por autores peruanos, y deja
para los estudiosos el reto de hurgar sobre las revistas y periódicos
destinados a la infancia, mencionando Figuritas (publicada desde 1810
hasta 1915, Cholito que apareció en 1930, Avanzada que empieza a
circular en 1952, bajo la conducción del sacerdote Ricardo Durand Flores.
Es
interesante conocer las respuestas de Cota Carvallo en una encuesta realizada
el poeta Jesús Cabel el año 1981:
·
Cuál es su opinión sobre el
destinatario de las obras que se publican en la época: “Buena parte de la
literatura infantil que se produce en el Perú está lamentablemente dirigida a
las clases altas y tradicionales y se continúa utilizando los mismos personajes
anacrónicos ya superados como reyes, hadas y princesas”. (Cabel,
1981, p. 14).
· De las obras editadas de Literatura Infantil en el Perú ¿cuáles considera que son fundamentales?: “Considero fundamental la literatura infantil inspirada en nuestro folklore, como son las obras de José María Arguedas, Jiménez Borja, Izquierdo Ríos y Rosa Cerna”. (Cabel, 1981, p. 14).
· ¿Qué fines debe perseguir la Literatura Infantil en el Perú? “Creo que la Literatura Infantil debe procurar al niño una verdadera conciencia de su identidad nacional y de la naturaleza que lo rodea, deberá de estimular su imaginación, al mismo tiempo que afine también su sensibilidad”. (Cabel, 1981, p. 15).
Hasta allí llegaron los desvelos de Carlota Carvallo. Los escritores que bregaron por una literatura infantil acorde con las necesidades e intereses sociales y culturales de los niños, un medio que transporte con la magia de la poesía, la narración y el teatro a los niños a mundos de ensueño, que deleite, que produzca satisfacción espiritual a la vez que contribuya al enriquecimiento del lenguaje, al fortalecimiento de su identidad cultural nos dejaron la posta.
Obra poética inédita
La obra literaria publicada de la escritora
Carlota Carvallo de Núñez, como puede apreciarse en los registros
bibliográficos existentes, comprende principalmente narraciones y obras de
teatro escolar.
Sus poesías no se publicaron como libro. Se
encuentran de manera dispersa en el suplemento especializado para niños Urpi,
del diario La Prensa y en revistas. Varios poemas todavía se mantenían inéditos,
hasta la publicación de nuestro reciente libro, por ahora virtual El
universo fantástico de Carlota Carvallo (2021).
Se trata de un manojo de poemas de la escritora
Cota presentó a un concurso que convoqué el año 1979, cuando yo era Coordinador
de Cultura de la Comisión Nacional del Año Internacional del Niño.
El citado material original de poemas
“inéditos” mecanografiados en papel copia, comprende treinta y nueve poemas
sobre temas diversos.
·
Animales: “Ruidos nocturnos”, “La cuculí”, “El pájaro y la
estrella”, “En dónde está”, “Ocho palomitas”, “Si viene la avispa”, “El caballo
blanco”, “Michirrita”, “Los burros tienen zapatos”, “La gallinita blanca”, “El
gallito de las rocas”, “El guanaco y la vicuña”, “El monito y el perezoso”.
·
Personajes niños: “Cuando
sea grande”, “¡Ah los niños”, “¡Niño mío!”, “La niña y el mar”, “Por qué no
vienes”, “Una niña vendrá”, “Mientras duerme la nenita”, “Muchachitos”, “¡Ahí
viene el viejo!”, “Niñita serrana”, “La niña estrella”, “Manolín” y “Me llamo
cándido”.
El
lenguaje es sencillo, adecuado al nivel de comprensión de los niños. Los versos
son libres, poco apegados a la métrica o a la rima. En determinados poemas se
emplea onomatopeyas (“Cantan las gotas” y “Gallinita blanca”).
Al final del folder se encuentran dos cuentos:
“Víspera de Reyes” y La tinya”. El 9 de enero de 1983 publicamos en el diario
La Prensa, en el suplemento dominical ilustrado para niños La Mariposa de Cristal,
el cuento inédito Víspera de Reyes, con bellas ilustraciones del artista Jesús
Rojas Rivadeneira.
Valoración crítica
La novela Rutsì, el pequeño alucinado y sus
cuentos tienen dos características de origen básicos: El folklore peruano y la
imaginación creativa de la autora.
Lo primero surge de sus experiencias de
infancia y juventud vinculadas al ambiente bucólico de la pequeña ciudad
norteña donde vivió. Del personal de servicio, por lo general andino y las
festividades, costumbres y mitos del pueblo que se narraban en las reuniones
familiares.
Las historias producto de su genio creador a su
vez, tratan temas que podríamos denominar de realismo social y de fantasía.
Cuentos y relatos tomados de hechos de la vida cotidiana, de acontecimientos curiosos, que en la pluma de la autora, narrados con sencillez se tornan en bellas obras de arte que muestran el paisaje y la realidad social en la que se desenvuelve la vida de su entorno.
Galardones
A mérito de su infatigable labor creadora,
Carlota Carvallo de Núñez, además los premios por su obra teatral y pictórica
que ya mencionamos, recibió innumerables distinciones, siendo las más
importantes:
1943: Primer Premio por Rutsí, el pequeño
alucinado, otorgado por la editorial Farrar & Rinehard.
1956: Primer Premio de Cuentos por la obra La
soledad de Timoteo, otorgado por el diario La Crónica.
1958: Primer Premio de Cuentos Infantiles por
la obra “El pájaro niño”. Diario El Comercio.
1964: Premio Extraordinario “Doncel” por la
obra Jo de plata, otorgado en el marco del IX Congreso de IBBY.
Primer Premio por la obra Cuentos peruanos,
presentado en la “Campaña por una buena literatura para niños”, realizada en
Buenos Aires.
1964: Primer Premio por la obra “La niña del
espejo”, en un concurso organizado en Argentina.
1965: Premio Doncel de cuentos infantiles por
el libro “Oshta y el duende”. Madrid.
1972: Premio Nacional de Fomento a la Cultura
“José María Eguren” en el área de Literatura Infantil por el libro “Cuentos de
Navidad”.
1979: Primer Premio por el cuento “La flor del tiempo”, otorgado por Journal do Brasil y la Fundación del Libro Infantil y Juvenil.
Coda
Alguna vez nos preguntamos: ¿Cuál fue la fuente
de inspiración de la escritora Carlota Carvallo de Núñez, quien empleó con
destreza todos los géneros literarios que plasmaba con pinceladas artísticas
que parecían bordonear una guitarra, la naturaleza, la vida, la flora, la
fauna, las riquezas minerales, el folklore, la historia?
Su principal inspiración sin duda fue el amor
por los niños y el profundo conocimiento del alma de los peruanos. Solo una
persona que ama puede describir sus sentimientos con la sinceridad que aflora
con claridad y sencillez. Su fuente de inspiración fue el Perú, su patria,
nuestra patria, que debemos aprender a amar tal como nos enseñó a hacerlo esta
extraordinaria escritora.
Carlota Carvallo de Núñez falleció el 29 de marzo de 1980, pero su obra literaria la mantiene viva en nuestra memoria y juguetea con los niños, deleitándolos con los personajes fantásticos que ha creado.
Referencias
Asociación Peruana de
Literatura Infantil y Juvenil. (2017). Literatura Infantil y Juvenil y Comprensión
Lectora. Lima: Ediciones Lexicom S.A.C.
Barrios Gonzales, R. A.
(1990). Lectura y Adolescentes. Lima: Concytec.
Cabel, J. (1981).
Literatura infantil en el Perú/debate y alternativa. Lima: Amaru Editores.
Cabel, j. (1984).
Literatura infantil y juvenil en el Perú/análisis y crítica. Lima: Centro de
Investigación de la Literatura Infantil y Juvenil del Perú.
Carvallo de Núñez, C.
(1990a). Carlota Carvallo 1909-1980. Lima: Dirección General de Bibliografía
Nacional y Ediciones.
Colchado, P. (2009).
Alborada Internacional. Revista de Arte y cultura(2).
Eslava, J. (05 de julio de
2009). La más bella cuculí. El Comercio.
Flores Scaramutti, C.
(1982). La literatura infaltil ayacuchana. Ayacucho: Universidad Nacional San
Cristóbal de Huamanga.
Flores Scaramutti, C.
(1984). Reflexión y crítica en torno a la Literatura Infantil. Lima: Jahnos
Impresores.
García Padrino, J. (2010).
Gran Diccionario de Autores Latinoamericanos y Literatura Infantil y Juvenil.
Madrid: Fundación S.M.
Gonzalez Vigil, J. (19 de
julio de 2009). Centenario de Cota. El Comercio.
Heflin, D. D. (1991). La
contribución cuentística de Carlota Carvallo a la literatura infantil peruana.
Texas University, Texas.
Indacochea P., M. (1965a).
Literatura Infantil. Lima: Imprenta Editorial San Antonio.
Indacochea P., M. (1965b).
Manos de madre. Lima: Editorial San Antonio.
Indacochea P., M. (1965c).
teatro y radio-teatro escolar. Lima: Editorial San Antonio.
Izquierdo Ríos, F. (1969).
Literatura Infantil en el Perú. Lima: Ediciones de la Casa de la Cultura del
Perú.
Lozano Alvarado, S. E.,
& Salas Salas, L. G. (1985). Literatura infaltil y educación. Lima: Centro
de Investigación de la Literatura Infantil y Juvenil del Perú.
Lozano Alvarado, S. E.,
& Salas Salas, L. G. (1995). Ronda de Luna, ronda de miel. Trujillo:
Editorial Libertad E.I.R.L.
Lozano Alvarado, S., &
Salas Salas, L. G. (1977). Literatura Infantil. Cajamarca: Editora e Imprenta
El Sol.
Maldonado de Miranda, S.
(1988). El contenido social de la literatura peruana contemporánea. Arequipa:
Tipografía Miranda.
Maldonado de Miranda, S.
(1988). Evolución de la poesía infantil peruana. Arequipa: Tipografía Miranda.
Niere de Dammert, G.
(1964). Cuentos infantiles del Perú. Lima: Talleres Gráficos P.L.; Villanueva
S.A.
Nuñez, E. (1940). Cantos infantiles.
Revista IPNA.
Nuñez, E. (1946).
Canciones infantiles Peruanas. Revista IPNA, 5(5), 43-62. Recuperado el 05 de
octubre de 2010, de
https://sites.google.com/site/marareq/musicaperuana-bibliografia/canciones-infantiles.
Petro Perú. (1974). Cota
Carvallo. Lima: Ediciones Retablo de Papel.
Rosario, R. (1984). La
literatura infantil en la educación Inicial. Lima: Unicef.
Rosario, R. (2009).
Vigencia de Carlota Carvallo. Revista Alborada(2).
Rosario, R., & Tupiño,
B. (1990). La poesía infantil en la educación inicial y básica. Lima: Centro de
Estudios del Menor.
Sánchez Lihón, D. (1974).
Lenguaje y expresión de los niños. Lima: Ediciones Retablo de Papel.
Sánchez Lihón, D. (1983).
Literatura Infantil. Lima: Ediciones Inti.
Sánchez Lihón, D. (1986).
Literatura infantil magia y realidad. Lima: Instituto del Libro y la Lectura.
Sotelo, Á. (1979). Teatro
escolar popular. Lima: Ediciones Inkari.
Sotelo, Á. (1996). Teatro
para niños y jóvenes. Lima: Ironyola Editores.
Ugarte Chamorro, M. A.
(1946). Teatro Escolar. Lima: Prensas del Ministerio de Educación Pública.
Ugarte Chamorro, M. A.
(1947). Juegos, canciones, dichos y otros entretenimientos de los niños.
Arequipa: Tipografía Portugal.
No hay comentarios:
Publicar un comentario