Discurso de incorporación a la Academia Peruana de Literatura Infantil y Juvenil, Dr. Luzmán Salas Salas
Desde la hermosa e histórica tierra andina de Cajamarca, cantera de mis sueños y realizaciones, he venido a la capital del Perú, para recibir con humildad el reconocimiento de la prestigiosa Academia Peruana de Literatura Infantil y Juvenil.
He entregado desde hace treinta y tres
años mi ración de simpatía e identificación con los quehaceres de la literatura infantil y juvenil en nuestra
patria, y ese es mi más grande orgullo que hoy lo comparto con la majestad de
los honorables miembros de la Academia, con el sudor y entrega de mis
compañeros y Colegas de la Asociación Peruana de Literatura Infantil y Juvenil
(APLIJ), con quienes hemos soñado en la belleza literaria que puede engrandecer
a nuestros niños y jóvenes, con mis apreciados paisanos cajamarquinos
integrantes del Club Departamental de Cajamarca con sede en Lima, con mis
distinguidos hermanos egresados del glorioso y emblemático Colegio de San Ramón
de Cajamarca, con todos los presentes, familiares y amigos, todos ustedes excepcionales
testigos ante quienes hoy la ilustre Academia Peruana de Literatura Infantil y
Juvenil me honra acogiéndome en su seno.
Agradezco anticipadamente a los
respetables miembros de la Academia por haber acordado mi incorporación a tan
ilustre institución, y a nuestra insigne poetisa y escritora Carlota Flores Scaramutti
de Naveda por sus generosas palabras de recepción que ha de pronunciar en breve.
En esta solemne ocasión, permítanme
abordar el tema titulado HUMOR, EDUCACIÓN Y LITERATURA INFANTIL.
EL HUMORISMO
El humor o humorismo ((del latín:
humor – oris) es definido como el modo de presentar, enjuiciar o comentar la
realidad, resaltando el lado cómico, risueño o ridículo de las cosas.
Los antiguos griegos creían que el
cuerpo humano contenía cuatro líquidos básicos llamados “humores”, los cuales
relacionaban con los cuatro elementos (Aire, Fuego, Tierra y Agua). Estos
líquidos eran sangre (aire), bilis amarilla (fuego), bilis negra (tierra) y
flema (agua). Su balance era considerado esencial para la buena salud. Cuando
alguien estaba en buen balance, lo consideraban de “buen humor”.
(etimologías.dechile.net/?humor).
Según la procedencia latina, la
palabra humor, humoris, significa propiamente “líquido, humedad”
especialmente el agua, y muy especialmente aquella que resuma de la tierra
(tierra es en latín humus) aunque es
la etimología popular la que en Roma parece vincular humor a humus, ya
que propiamente el vocablo arcaico y sus derivados se escriben sin hache (umor,
umidos, umidificare…) y proceden de un verbo umeo que significa “estar
empapado”.
En el imperio romano el prestigioso
médico Galeno, nacido en Pérgamo, añadió un quinto humor, que en este caso era
un soplo o “spiritus”, más que un líquido y lo llamó “pneuma” (neumonía?).
Durante la antigüedad, la edad media
y buena parte de la edad moderna, la medicina se basó en los principios
galénicos de los cuatro humores o líquidos dominantes en el cuerpo. Estas teorías
eran disparates empíricos, pero ocupaban demasiados siglos en la historia como
para no haber dejado alguna huella. Así sobreviven muchas palabras relacionadas
con estos humores en el lenguaje actual:
·
La bilis negra o “humor
negro”, cuando predominaba en la complexión, pensaban que producía tristeza,
pesimismo, mala voluntad, por eso hoy llamamos “humor negro” a la despiadada
crueldad del que se ríe de las desgracias. En griego “negro” era mélanos
y “bilis” kolé, de ahí que al dominado por esta bilis negra se le
llamase melnkholikós, de donde deriva
melancólico, y también en latín su equivalente era atrabilis (“atra” es
“negra”), de ahí “Atrabiliario”.
·
Del dominado por la
bilis roja, que era sanguinario e iracundo, conservamos el adjetivo “colérico”
y el sustantivo “cólera”.
·
El humor flemático (la
flema o phlegma eran los mocos) se creía que si se acumulaba en un punto
producía una inflamación que todavía cuando ocurre en los huesos maxilares a
causa de infecciones dentales se le llama “flemón” o “flegmón”. Estaba asociado
con el comportamiento “huevón” (en el sentido de flojo o poco activo) y por eso
a los que alteran poco o tienden a mantener la compostura aún se les llama
“flemáticos” (como a los ingleses).
·
Si la mezcla de los
cuatro humores daba como resultado un carácter agradable en el trato, se decía
que la persona era (o estaba) de “buen humor”, pero cuando de la mezcla
resultante el carácter era intratable, hosco y desagradable, se decía que era
(o estaba) de “mal humor”. Se pensaba que los humores eran variables (“Veremos de
qué humor está Fulano hoy”). De la hipertrofia del sentido del “buen humor”
hemos sacado los modernos el concepto del “humorismo” y el “humorista”, pero a
lo mejor, si Cervantes resucitaba y lo oía, se creía que un humorista era una
especie de endocrinólogo.
Por su parte, Joseph Klatzmann, en
su obra L’humor juif (El humor judío), define el humorismo según
su necesidad: “Reír para no llorar”. Más pesimista, se puede citar igualmente a
Nietzsche: “El hombre sufre tan terriblemente en el mundo que se ha visto
obligado a inventar la risa”, concepción que se aproxima a la filosofía cínica
y que establece que el humor es, en el fondo, un tipo de catarsis o
contraveneno espiritual.
El humorismo hace uso de la
comicidad para derivar en una forma de entretenimiento y de comunicación humana
que tiene la intención de hacer que la gente no se sienta infeliz y ría. La
risa es, además, una de las pocas cosas que individualizan al ser humano y a
algunas especies de homínidos respecto a otros animales; los etólogos señalan
que el humor es ante todo un rictus que aparece en los labios de los primates y
se muestra cuando estos se enfrentan a situaciones para ellos absurdas e
incomprensibles: enseñar los dientes es una forma de desviar un impulso
agresivo o de resumirlo mímicamente, un tipo de sublimación. De ahí que enseñar
los dientes o reír entre los humanos esté frecuentemente ligado a disociarse de
acontecimientos que suscitan normalmente profunda inquietud y que muchas veces
se asocie con la desgracia (humor negro). Incluso se habla a veces de la
risa nerviosa, como un acto fallido del subconsciente. Desde este punto de
vista el humor se constituye en un acto de purificación que permitirá evacuar
esta violencia, nacida de la frustración y del sufrimiento.
El humor desempeña una función
catártica semejante al de las lágrimas, pero diferente en cuanto a que el humor
supone una separación de y no una identificación con el objeto que es soporte
del mismo, un desaprecio y no una compasión. De ello deriva también la curiosa
relación sadomasoquista entre el humorista y el auditorio, que se expresa en
risa; el humorista se presenta muy frecuentemente ante sus oyentes como
resentido y humillado. Como hemos dicho ya, el origen del término humor viene de la teoría de los cuatro humores
del cuerpo de la medicina griega, que regulaban el estado de ánimo: la bilis,
la flema, la sangre y la bilis negra o atra bilis.
El carácter humorístico corresponde al humor sanguíneo.
Existen diferentes tipos de humor
adaptados a diferentes sensibilidades y grupos humanos. Por ejemplo, los niños
suelen reírse más de las caídas y tropiezos, mientras que no comprenden la
sutileza de la sátira o de la ironía.
También hay variaciones culturales
del sentido del humor, que puede hacer que lo que es divertido en un sitio
carezca de gracia en otro. Esto se debe a que en el humor cuenta mucho el
contexto, los a priori.
Por otra parte, es preciso señalar
que se ha intentado utilizar el humor como un instrumento educativo (e ello se
debe el célebre adagio castigat ridendo mores, “corrige riendo las
costumbres”, que se utiliza como definición de la utilidad de la comedia
clásica o neoclásica).
Existen algunas técnicas específicas
de humor verbal, tales como la ironía, el sarcasmo, la hipérbole, el anticlímax
(“Dios ha muerto, Nietzsche ha muerto y yo no gozo de buena salud”, Woody Allen,
estadounidense), el enigma o definición incompleta o elíptica, la antítesis, el
oxímoron, la atenuación o litotes, la alusión, el non sequitur, la silepsis, el
juego de palabras, la sátira, la parodia o la paradoja. Y otras no verbales,
referentes a una retórica paralela que juega con los gestos, posturas, caídas,
resbalones, etc. que se suela denominar humorismo de situación.
TIPOS DE HUMOR
1. El humor absurdo, también conocido como humor superrealista. Es un
tipo de humor que se vale de las situaciones disparatadas o incoherentes para
generar la risa en el público; su comicidad se basa en la irracionalidad. Es un
humor totalmente alejado de la realidad pero que a la vez nos sumerge en lo
esencial de ella. Por ejemplo, el asno que funge de astrónomo para anunciar la
lluvia.
2. El humor blanco. Es un tipo de humor que no contiene connotaciones
ni denotaciones negativas (humor negro, a saber: burla, ironía, machismo
o feminismo, cinismo, sexismo, racismo, etc.). Se basa en los siguientes
elementos: a) el factor sorpresa; b) la calidad (o gracia) del intérprete
(continente), y c) la calidad de lo expuesto (contenido). Un tipo de humor
blanco es el chiste de salón, que se llama así porque este tipo de humor se
aprecia en un salón distinguido. Por ejemplo: La profesora pide a los niños en
clase que cada uno describa a su perro que tienen en casa. Entre los alumnos
hay dos hermanitos. Luego de realizada la tarea, la profesora le dice a uno de
los hermanos: “Tu descripción es exactamente igual a la de tu hermano. ¿La has
copiado?” El chico responde: “No, señorita, lo que pasa es que el perro es el
mismo”.
3. Humor gráfico. Son chistes de viñetas y caricaturas, hasta verdaderas
historietas, tiras cómicas e incluso planchas enteras. Abundan en la sátira de
la actualidad política y social.
4. El humor hacker. Es un tipo de humor que comparten los expertos en
computadoras (en particular, los hackers), que incluye cosas como parodias
elaboradas de documentos como especificaciones, estándares, descripciones de
lenguajes, etc.
5. El humor negro es un
tipo de humor que se ejercía a propósito de cosas que suscitarán, contempladas
desde otra perspectiva, piedad, terror, lástima o emociones parecidas.
Cuestiona situaciones sociales que generalmente son serias mediante la sátira.
El asunto más recurrente en el humor negro es la muerte y todo lo que
está relacionado con ella. Atañe los temas más oscuros y dolorosos para el ser
humano y que, por norma general, suelen resultar controvertidos y polémicos
apara la sociedad porque están relacionados con la moral. Algunos ejemplos
pueden ser las tragedias, las normas sociales, la sexualidad, los asesinatos,
el suicidio, las enfermedades, la pobreza, la locura, el terrorismo, el
racismo, la drogadicción, la violación, las discapacidades, la guerra, la
religión, la política, etc., pero representados en forma cómica.
6. El humor negro en
la cultura popular. En la vida real
El humor negro aplicado a uno mismo
en una situación desesperada es conocido como “Humor de patíbulo” (traducción
del inglés: Gallows humor).
Un ejemplo famoso es el de Pedro
Muñoz Seca (escritor y autor de teatro español) ante el pelotón de fusilamiento
en la Guerra Civil Española:
“Podéis quitarme la hacienda, mis
tierras, mi riqueza, incluso podéis quitarme, como vais a hacer, la vida; pero
hay una cosa que no podéis quitarme… y es el miedo que tengo”. (es.
wikipedia.org/wiki/Humorista).
EL SENTIDO DEL HUMOR (Fragmento de Artes del buen vivir,
Roxana Kreimer, Ediciones Anarres).
El sentido del humor es el término
medio entre la frivolidad, para la que casi nada tiene sentido, y la sociedad,
para la que todo tiene sentido. El frívolo se ríe de todo, es insípido y
molesto y con frecuencia no se preocupa por evitar herir a otros con su humor.
El serio cree que nada ni nadie deben ser objetos de burla, nunca tiene algo
gracioso par decir y se incomoda si se burlan de él. El humor revela así la
frivolidad de lo serio y la seriedad de lo frívolo. Se trata de una virtud
social: podemos estar tristes en soledad, pero para reírnos necesitamos la
presencia de otras personas.
Etimológicamente la palabra
divertirse remite a la acción de salirse del vértice, es decir, a la ruptura
con el orden cotidiano de significados (…)
Carecer de humor es carecer de
humildad, es estar demasiado inflamado de uno mismo. Pero no exageremos la
importancia del humor: un mal tipo puede hacer gala de un humor exquisito, y es
posible ser buena gente y carecer por completo de sentido del humor. No
obstante, quien tiene humor suele ser más estimable que quien no lo posee (…)
El humor es una demostración de
grandeza que pareciera decir que en última instancia todo es absurdo y que lo
mejor es reír. En su breve escrito de 1927, “El Humor”, Freud pone el ejemplo
de un preso que va a ser colgado en la horca un lunes, y ante esta situación el
reo dice: “¡Bonita forma de comenzar la semana”.
El humor es una afirmación de
dignidad, una declaración de superioridad del ser humano sobre lo que acontece.
Cuenta Diógenes Laercio que a Metrocles se le escapó una sonora ventosidad
mientras tomaba una clase de filosofía. Tan grande fue el rubor que le
sobrevino que se encerró en un cuarto con ánimo de dejarse morir de hambre.
Crates entró a consolarlo tras ingerir comida flatulenta y, como no pudo
persuadirlo diciéndole que no había cometido ningún absurdo sino que más bien
sería cosa monstruosa no despedir los flatos según marca la naturaleza, soltó
él también su flato, con lo cual los dos rieron y Metrocles dejó de sentir
vergüenza.
Escribe Comte-Sponville (filósofo
francés): “Se puede bromear acerca de todo: el fracaso, la muerte, la guerra,
el amor, la enfermedad, la tortura. Lo importante es que la risa agregue algo
de alegría, algo de dulzura o de ligereza a la miseria del mundo, y no más
odio, sufrimiento o desprecio.”
Las virtudes de reír y hacer reír no
siempre van juntas. El Corán juzga
que quien hace reír al prójimo merece el paraíso, pero nada dice sobre el saber
reír. Conocemos gente poco hábil para hacer reír, cuya risa es deliciosamente
oportuna y contagiosa. También ellos merecen el paraíso.
La risa aparece como la distancia
más corta entre dos personas. No es un mal comienzo para la amistad.
RECURSOS DEL HUMOR
Hagamos un repaso que el humor es
una suma de cosas serias.
Lo cómico implica la transgresión de una regla: para que el efecto sea cómico se supone que se conocen
las normas que se están violando. En general, lo que viola lo cómico con
disposiciones comunes, reglas que, como integrantes del cuerpo social,
consideramos como dadas. La torta estrellada en la cara de un señor de smoking
que charla seriamente en una reunión resulta cómico porque se supone que se
debe convidarle torta, no estrellársele en la cara. Otro ejemplo:
-
¿Vamos a jugar al Polo?
-
No, mejor vamos a mi casa, que es más cerca . Se está violando una regla, se espera una respuesta
adecuada a la pregunta, sin embargo, se juega con la ambigüedad de la palabra
“Polo”. Se le propone jugar a un juego, no trasladarse a un lugar.
Otro ejemplo: - ¡Vendo Huevos!, ¡Vendo huevos!
-
Pos, ¿pa qué los quiero
vendaos?
La expectativa
frustrada: Muchas veces algo nos
resulta cómico porque resulta lo contrario de lo que estábamos esperando. En el
chiste anterior se espera una respuesta favorable a la oferta de venta de
huevos, sin embargo obtenemos otra respuesta que defrauda nuestra expectativa y
desconcierta.
Una variedad de este procedimiento frecuentemente
empleada por los humoristas consiste en la brusca variación del estilo (lengua
formal o informal, tipo de texto que se utiliza). Ejemplo: “En 1879. Alemania: Nace Einstein, gran genio
de la humanidad, enunció la teoría de la relatividad. Revolucionó la física
moderna. Ganó el Premio Nobel y luchó por la paz mundial. En todos los bailes planchaba”.
El extrañamiento: el ver las cosas, las costumbres, las personas siempre de
la misma manera hace que nuestra percepción se automatice. Para evitar esta
automatización, para provocar una percepción nueva se utiliza la mirada del
extrañamiento; es decir, ver las cosas como si fuera por primera vez, es una
percepción renovada.
Ironía: es una figura retórica que supone siempre una
inversión. Cuando exclamamos: “¡Qué hermoso te quedó el pelo! Ante un
extrafalario corte de pelo de un amigo, pretendemos que este entienda lo
contrario. Es una oposición entre el sentido literal y el derivado.
Sátira: es un género que tiene por objeto corregir, por el
ridículo, vicios del comportamiento humano, vicios morales y sociales.
Humor costumbrista:
manifestaciones artísticas que reflejan hábitos sociales
de un lugar y una época. Ofrece un cuadro verosímil, creíble de la vida
cotidiana y la presentación de personajes tipo y lugares precisos.
Hipérbole: uno de los recursos de más efecto, es decir, la
exageración desmedida de situaciones, vicios, costumbres, defectos y bondades
sociales. Se suele denominar a este recurso también “bola de nieve”: va progresando desde una situación normal a una
situación absurda por lo desmedida.
Repetición: cuando una frase, un gesto, una actitud o una acción
natural y habitual de las personas se repite una y otra vez, llega un momento
en que pierde su humanidad y se vuelve mecánica, se automatiza. Lo mecánico
resulta inflexible, seriado, y cuando se automatizan hábitos y conductas puede
resultar cómico. Por ejemplo el Quijote, personaje que se empeña en luchar y
solucionar entuertos más allá del fracaso.
EL SIGNIFICADO Y EL
ALCANCE DEL BUEN HUMOR
El buen humor, mientras dura, favorece la capacidad de pensar con flexibilidad y con mayor
complejidad, haciendo que resulte más fácil encontrar soluciones a los
problemas, ya sean intelectuales o interpersonales. Esto sugiere que una forma
de ayudar a alguien a analizar un problema es contarle un chiste.
Fortalece el sistema inmunológico. Arthur Stone, psiconeurólogo norteamericano, encontró en la mucosa nasal de las personas más sonrientes una mayor cantidad de inmunoglobulina A, una sustancia que refuerza las defensas del organismo. Además, según el doctor César Díaz Carrera, “en estados de satisfacción, el timo –una glándula situada entre el esternón y el corazón- fabrica más timina, uno de los componentes que contienen los fármacos antidepresivos y que además nos hace resistentes contra las enfermedades”.
EL HUMOR EN LA
EDUCACIÓN (Del libro El valor pedagógico del humor en la educación social, de los
autores Jesús Damián Fernández Solís (docente de la Pontificia Universidad de
Comillas y Universidad Complutense) y Juan García Cerrada (Director del
Departamento de Humor gráfico de la Fundación General de la Universidad de
Alcalá).
En el prólogo de dicha obra, Eduardo Jáuregui (Profesor del Departamento de
Business and Social Sciences de la Universidad de Saint Louis, Campus de
Madrid), afirma:
“Diversos estudios de investigación en campos como la
psicología, la sociología, la pedagogía y la antropología han ido constatando
que el humor es un tema bien serio. Como es ya bien conocido, la risa reduce el
estrés y nos ayuda a superar problemas personales y tensiones interpersonales.
Se trata de un auténtico paraguas sobre las adversidades, un recurso que
podemos emplear incluso cuando todo lo demás falla (…), el sentido del humor
puede ser un recurso importante a la hora de manejar conflictos y afrontar
situaciones emocionales difíciles (…), después de reír somos más creativos,
tomamos mejores decisiones, somos más generosos y nos acercamos más a los
demás. Sabemos también que el humor juega un papel fundamental en la comunicación,
ya que atrae la atención del público, rompe barreras e incluso estimula la
memoria. Por lo tanto, tenía razón Oscar Wilde al afirmar que “la vida es
demasiado importante como para tomársela en serio”, y creo que lo mismo puede
aplicarse al trabajo socio-educativo.
Espero que muchos educadores adopten el humor como una
herramienta básica de su trabajo, aprendiendo a tomarse sus labores con
seriedad, pero sin una excesiva solemnidad”.
En la Introducción del mencionado libro se dice:
“El educador vive permanentemente entre dualidades; entre
el optimismo y cierto grado de pesimismo; entre la esperanza y el desconsuelo;
entre la seguridad y la desconfianza, entre la certeza o la duda permanente;
entre la ilusión desbordante y el desánimo.
De allí la importancia del humor y de la risa desde
diferentes perspectivas:
Primera: de
cara a la propia estabilidad emocional y cuidado personal.
Segunda: de
cara a buscar nuevos y creativos proyectos de intervención socioeducativa.
No cabe duda de que el humor es una llave maestra que abre las puertas de la
creatividad y la imaginación a través de talleres, de la elaboración de
materiales, del diseño de dinámicas y ejercicios divertidos. El carácter
didáctico y motivador del humor pone de
manifiesto su poder como herramienta pedagógica porque se agilizan los
procesos de enseñanza-aprendizaje. El
humor es la llave maestra para comprender el proceso creativo (Arthur
Koestler).
Tercera:
Porque es necesario dar una respuesta positiva, alegre y optimista a las
personas con los que trabajan los educadores sociales. Una canción popular
Idish reza:
El ayer ya no existe,
todavía no hay mañana,
solo un trocito de hoy,
no lo estropee con lágrimas.
Cuarta:
Porque es un elemento de comprensión de la realidad. El sentido del humor nos
ayuda a comprender el mundo que nos rodea desde una mirada amable, generosa y
divertida. Nos hace ver la realidad desde diferentes perspectivas gracias a
que: dramatiza situaciones conflictivas; posibilita la observación de los
fenómenos con diferentes claves humorísticas de interpretación.
Quinta: Porque
genera un estilo de relación socioeducativa: “El día más perdido es aquel
que no nos hemos reído”.
En la Memoria de Máster en Lingüística Aplicada a la
Enseñanza del Español como Lengua Extranjera, con el título de El uso del humor en la enseñanza. Una visión
del Profesorado de ELE (2010-11, Universidad de Jaén), Francisco Manuel
Rivero González y la tutora Dra. Sonia Fernández Hoyos, consignan inicialmente
la siguiente expresión del escritor estadounidense Tom Davis:
The job of the
teacher is to get students laughing, and when their mouths are open, to get
them something on wich to chew”.
En dicha Memoria, los
autores señalan las siguientes funciones del humor:
·
Función motivadora.
·
Función de camaradería y
amistad.
·
Función de distensión.
Buscamos reducir las situaciones conflictivas por medio de una huida por la
escalera de incendios de lo cómico. Esto actuará como una válvula de escape que
nos ayuda a la descompresión de los elementos negativos con los que nos podemos
encontrar.
·
Función de diversión.
Para Francia y Fernández, “El placer de la risa es el placer de los placeres”
(2009, p. 61. Educar con humor. Málaga,
Edición Aljibe).
·
Función agresiva. Evitar
la ironía o el sarcasmo.
·
Función defensiva. Nos
adelantamos a los demás demostrando sus posibles argumentos. Yo soy un buen
conocedor de lo que me pasa, de cómo soy así que debo ser el primero en reírme
de mí.
·
Función intelectual. Nos
encontramos con una función cognitiva. Potencia la memoria y la creatividad.
·
Función creativa. Nos
facilita el encuentro con nuevas conexiones mejorando la imaginación y la
originalidad. Provoca el avance en el conocimiento profundo de la realidad
mediante la inspección continuada de la misma.
·
Función transformadora.
Es una búsqueda de la transformación, un paso hacia adelante en la historia
común.
·
Función pedagógica. Hay
un nuevo modelo de enseñanza en el que se prima la buena relación entre educador-educando
mediante un ambiente positivo y enriquecedor para ambos. “La comunicación no
puede estar basada en la dominación de unos sobre otros” (Flores, 1997. Chistes para facilitar la comunicación entre
educadores matemáticos. www. Ugr.es/-flores/textos/artículos/Propuestas/Chistes.pdf.)
La relación con el
proceso enseñanza-aprendizaje
Mediante el humor se genera un mayor número de procesos
de enseñanza-aprendizaje provocando una mayor significación de los mismos.
Sin embargo, Burguess R. nos recuerda que la introducción del humor
en nuestra aula no debe significar crear una rutina diaria o incluir
sistemáticamente chistes en todas las lecciones” (2003, p. 45. Escuelas que ríen. Capital Federal
Argentina, Editorial Troquel).
El humor tiene su momento, por lo que no tenemos que
obsesionarnos con la idea de que todo debe ser vestido de él. La utilización
abusiva puede apartarnos de nuestro objetivo principal consiguiendo un efecto
contrario al deseado.
Para Mónica Guitart (Entrevista sobre Las ventajas de utilizar el humor en la
educación. Universidad de Cuyo, Argentina), “reír es un recurso didáctico
que mejora el rendimiento de los alumnos y los predispone de otra manera al
aprendizaje, mientras que para el docente representa la oportunidad de
establecer otro tipo de relación con el estudiante. Sin embargo, afirma:
“Nuestra meta como docentes no debe ser de convertirnos en comediantes, sino la
de mediar pedagógicamente a través del humor”.
Finalmente, sobre la relación entre humor y educación,
podemos concluir que educar es un acto de amor y el amor es alegría. Amor y
Humor son la sístole y la diástole de toda educación con corazón. Amor y humor
han de ser considerados elementos típicamente escolares, como son los libros,
los cuadernos, los lapiceros o las pizarras.
El aula ha de ser entendida, considerada y vivida como un
campo de cultivo de sonrisas, miradas y caricias, como un escenario en el que
cada día se hace danzar la vida en el corazón de los niños o como un altar en
que los maestros renuevan, cada mañana, su vocación y entrega a la tarea más
noble y sagrada del mundo.
El amor pone las llaves y el humor abre las puertas para
una educación con Co-razón. Por eso se ha dicho que la mejor enseñanza no es la
que se hace de cerebro a cerebro, sino de corazón a corazón.
¿QUÉ HACE REÍR A LOS NIÑOS?
Al preguntarse qué hace reír a los niños, el escritor
argentino Luis Pescetti, profundo conocedor del tema, ofrece en su sitio web
una larga lista de posibilidades. A su modo de ver, los niños se ríen de la
rebelión contra la autoridad –con todas las posibilidades que eso entraña-, de
lo que asusta y por consiguiente debe ser desafiado y vencido, del castigo a
los que cometen una falta contra la norma –sea intencional o no-, de la pérdida
de control, como en ciertos juegos de palabras.
El lenguaje y las formas literarias proponen muchos
recursos para experimentar el humor a través de los libros. Juegos de palabras,
en los que se alteran sonido y sentido. Exageraciones, equívocos e irreverencias
de diversa índole que proponen una dislocación de lo real, de lo conocido.
Transgresiones de normas lingüísticas, lógicas y sociales que se manifiestan
tanto en juegos con el lenguaje como en acciones y diálogos de personajes.
Por otra parte se encuentra el absurdo, que con su manera
demoledora de ubicarse en el mismísimo centro de lo que parece lógico,
estremece los cimientos de lo que se da por sentado y no solo invita a la risa
sino también a la pregunta y a la crítica. Entre los recursos humorísticos de
los que se sirve el absurdo se pueden mencionar la distorsión, la inversión o
la exageración de algunos aspectos del mundo real, asociaciones fortuitas de
sonidos y rimas, de malentendidos, juegos de homonimia, de perversas
confusiones entre los sentidos figurado y literal de las palabras, etc.
(Cancelas y Ouviñas, 1977). Las obras de Lewis Carroll y Edward Lear son
emblemáticas del absurdo en la literatura para niños. Muchos de los herederos
de estos autores: María Elena Walsh, Daniel Nesquens, Luis Pescetti, Ema Wolf
manejan el absurdo con mucha habilidad.
La sorpresa, lo inusitado, está en la raíz misma del
humor. El contraste entre lo que se espera y lo que sucede genera
inevitablemente la risa, como en este poema de Shel Silverstein
(estadounidense), de su libro Batacazos:
Me senté a la mesa y pedí una chuleta.
Y una suave voz mugió: “Vaya”.
Levanté la mirada y me di cuenta
de que la camarera era una vaca.
(Maité Dautant , venezolana)
EL HUMOR EN LA
LITERATURA INFANTIL
Francisco Delgado Santos, en El humor en la literatura para niños (2012) dice:
Debo declarar que por más “chistosos” que pudieran parecer algunos textos, siempre
deseché los que pecaban de vulgares, groseros, racistas, sexistas,
regionalistas o los que presentaban cualquier tipo de discrimen. Como bien ha
señalado Marc Soriano, en el terreno de la literatura infantil, una actitud de
burla generalizada no conduce al joven lector a una actitud positiva y tiende a
que mantenga las prevenciones que ya tenía. Lo mismo podría decirse de los
libros para niños que toman como hazmerreír a los negros, a los chinos, a los judíos o a los gitanos.
La risa suele ser beneficiosa, pero eso no significa que toda risa lo sea.
Veamos algunos textos graciosos:
Un cuento:
Había un perro que se llamaba cuento. Lo aplastó un carro
y se acabó el cuento.
Una exageración:
Había un pueblo tan caliente pero tan caliente, que las
gallinas ponían los huevos fritos.
Había tanta sequía que las vacas daban leche en polvo.
Cuasirrefranes:
En casa del aplazado… no hay que mentar las vacaciones.
Juegos lingüísticos:
No es lo mismo… pásame la pinza que písame la panza.
Es la
narración amena y graciosa de un hecho, acto, situación, acontecimiento, o a
veces la experiencia del yo, capaz de producir en el oyente o en el lector un
estado de ánimo alegre o risueño.
El cuento infantil no puede ser comparado con un texto
escolar, con un globo terráqueo o con un mapa, herramientas imprescindibles
para ciertos fines pedagógicos específicos. Tampoco puede ser creado a partir
de estos fines, pues se limitaría y se trastocaría su esenia literaria. Un
“cuento pedagógico” no significa nada para el niño y lo termina olvidando. Y se
queda solo como inútil texto que no es ni cuento ni pedagogía: esa es la muerte
del cuento.
Un cuento infantil debe ser una vivencia que marca
profundamente tanto al lector como al autor, pues se crean verdaderos lazos
afectivos, con la posibilidad liberadora de lo imaginario; para el niño, la
experiencia de leer debe ser tan intensa como el juego, como el andar en
bicicleta, como el tirarse a la piscina, a veces alegre y divertida, a veces
cargada de desafíos, triste y hasta atemorizante (Magdalena Helguera. Que el cuento sea cuento)
Es por ello que el humor en el cuento infantil se hace
casi imprescindible, justamente para ajustarse a esa forma de ser del niño, a su
concepción del mundo y a su modo de entender y aceptar la realidad, la misma
que puede llegar a ser dolorosa.
Henry Berson, filósofo francés, en su ensayo Le rire: Essai sur la signification du
comunique, manifiesta que por medio de la risa el hombre, en general logra
escapar de la rigidez y el automatismo tan presentes en la sociedad. Él busca
en la infancia, depositaria de la mayoría de nuestros sentimientos alegres, las
leyes fundamentales de la risa. Berson se plantea el hecho de que a una
determinada edad nos volvemos impermeables a las alegrías frescas y nuevas, y
que nuestras satisfacciones como hombres y mujeres maduros no son otra cosa que
sentimientos de infancia vividos. (Verónica Linares (2010). El humor y el temor en la literatura
infantil).
Contar cuentos a nuestros niños acerca del hombre y del
mundo que lo rodea jugando con el lenguaje, exagerando situaciones y
personajes, hará que formemos lectores que aprenderán con placer, lectores que
verán el mundo con humor, es decir aprenderán a ver la vida de un modo
positivo. (Sara Montalván Arteta (2009). El
humor en la literatura infantil).
A ello debemos agregar que los valores del relato
humorístico son: estéticos, éticos, educativos, didácticos y estilísticos.
No cabe duda, sin embargo, de que el
relato humorístico es la llave dorada con la cual podemos ingresar al
maravilloso mundo de la lectura. Pero también la propuesta humorística puede
llegar a convertirse en la puerta de acceso a la literatura global, a la
posibilidad del descubrimiento de otra manera de ingresar al mundo de las
letras con otro espíritu crítico, con una visión más lúdica que dentro de las
actuales corrientes educativas promueven el desarrollo humano. Por eso decía
Doménico Cieri Estrada: “La literatura es magia. Es aparecer entre la gente sin
estar físicamente, es entrar en las alma sin tener que tocar la puerta”.
Cierro mi disertación leyendo estos textos humorísticos
que sin duda les harán sonreír, porque como ha expresado el mexicano Jorge
Puente: “Quien tiene una sonrisa sincera en el rostro, tiene a Dios en su
corazón.”
EL
LEÓN, EL OSO Y EL ZORRO
Cierta vez, el león, cansado de cazar solo, invitó a sus compadres, el
zorro y el oso, a acompañarlo. Ellos aceptaron de mil amores, porque sabían que
el león era un as atrapando presas.
Fue un día de mucho provecho. Cuando acordaron descansar, habían casado
varios conejos, una cabra y un venado. El león se recostó y le dijo al oso:
- Compadre oso,
reparta usted la comida.
El oso, muy
comedido, empezó a separar por partes iguales: dos conejos para cada uno, una
parte de cabra; y estaba repartiendo el venado, cuando el león saltó sobre él y
lo mató en un instante.
Luego le dijo al
zorro:
- A ver, compadre
zorro, ahora le toca repartir a usted.
El zorro, ni
tonto ni perezoso, entregó todo al león, y solo se quedó con un conejo, el más
flaco.
El león sonrió
muy satisfecho y preguntó:
- Compadre zorro,
¿quién le enseño a repartir tan bien?
- ¡El oso,
compadre! ¡El oso!
LA
VACA ESTUDIOSA
(María Elena Walsh, argentina)
Había una vez una vaca
en la quebrada de Humahuaca.
Como era muy vieja, muy vieja
estaba sorda de una oreja.
Y a pesar de que ya era abuela
un día quiso ir a la escuela.
guantes de tul y un par de anteojos.
La vio la maestra asustada
y le dijo: Estás equivocada.
Y la vaca le respondió:
-¿Por qué no puedo estudiar yo?
La vaca, vestida de blanco,
se acomodó en el primer banco.
Los hicos le tiraban tiza
y no podían más de risa.
La gente llegaba en camiones,
en bicicleta y en aviones
Y como el bochinche aumentaba,
en la escuela nadie estudiaba
La vaca, de pie en un rincón,
rumiaba sola la lección.
Un día toditos los chicos
se convirtieron en borricos.
Y en ese lugar de Humahuaca
la única sabia fue la vaca.
EL
ZORRO Y EL CONEJO
Ciro Alegría
Una vieja tenía
una huerta en la que diariamente hacía perjuicios un conejo. La tal vieja no
sabía quién era el dañino. Y fue así como dijo: “Pondré una trampa”
Puso la trampa y
el conejo cayó, pues llegó la noche y en la oscuridad no pudo verla. Mientras
amanecía, el conejo se lamentaba: “Ahora vendrá la vieja. Tiene muy mal genio y
quién sabe me matará”.
En eso pasó por
allí un zorro y vio al conejo. ¿Qué te pasa?, le preguntó riéndose. El conejo
le respondió: “La vieja busca marido para su hija y ha puesto una trampa. Ya
ves, he caído. Lo malo es que no quiero casarme. ¿Por qué no ocupas mi lugar?, la
hija es buenamoza”.
El zorro pensó un
rato y después dijo: “Tiene bastantes gallinas”. Soltó al conejo y se puso en
la trampa.
El conejo se fue
y poco después la vieja salió de su casa y acudió a ver la trampa. “¡Ah!, ¿conque
tú eres?”, dijo y se volvió a la casa.
El zorro pensaba:
“Seguramente vendrá con la hija”. Al cabo de un rato retornó la vieja pero sin
la hija y con un fierro caliente en la mano.
El zorro creyó
que era para amenazarlo a fin de que aceptara casarse y se puso a gritar: “¡Sí,
me caso con su hija!”
La vieja se le
acercó enfurecida y comenzó a chamuscarle al mismo tiempo que le decía:
“¿Conque eso quieres? Te comiste mi gallina, destrozas la huerta y todavía
deseas casarte con mi hija… Toma, toma”. Y le quemaba el hocico, el lomo, la
cola, las patas, la panza.
La hija apareció
al oír el alboroto y se puso a reír viendo lo que pasaba. Cuando el fierro se
enfrió, la vieja soltó al zorro. “Ni más vuelvas”, le advirtió.
El zorro dijo:
“Quien no va a volver más es el conejo”. Y se fue todo rengo y maltrecho.
Muchas gracias.
CREATIVIDAD, DEDICACIÓN Y REFLEXIÓN EN EL
TABAJO INTELECTUAL DE LUZMAN SALAS SALAS, NOTABLE ESCRITOR CAJAMARQUINO
Por: Carlota Flores Scaramutti de Naveda
La
creación literaria es además de una intensa pasión, el ejercicio de una
profunda y dedicada reflexión que compromete , a quienes la experimentan, a
dedicar horas y horas, días y días en busca de las palabras, de los términos
exactos, de las figuras más creativas para reinventar la realidad y dar también
testimonio de ella.
Tal es el
caso de nuestro intelectual, Dr. Luzmán Salas Salas cuya obra acredita esta
ceremonia de incorporación a la Academia Peruana de Literatura Infantil y
Juvenil.
Por ello,
presentar, de un modo sucinto, el muy
valioso trabajo de este ya notable escritor es una tarea difícil y compleja,
sin embargo, lo intentaré.
Unos datos
de su biografía iluminarán mejor el conocimiento de su producción intelectual..
LUZMAN
SALAS SALAS, nació en Cajamarca, la histórica ciudad, en la provincia de
Cutervo, distrito de Choros , en 1941 y, como reseñan sus biógrafos, “a orillas
del célebre río Marañón”, el de las mil y un novelas, relatos y aventuras.
Entre 1956
y 1960, fue becario en el Colegio Nacional “San Ramón” de Cajamarca. Luego,
entre 1961 y 1965, cursó estudios superiores en la Facultad de Letras y
Educación de la Universidad Nacional de Trujillo. Al concluir, optó el título
de Profesor de Educación Secundaria en
la Especialidad de Castellano y Literatura, obteniendo además los siguientes
Grados Académicos: Bachiller en Educación, grado al que accedió con la tesis
“La Lírica cajamarquina contemporánea” (1978); Doctorado en Educación (1980),
grado para el que sustentó la tesis “La Literatura Infantil cajamarquina
aplicada a la educación”.
Su
ejercicio docente explica además su permanente afán innovador así como su tarea
minuciosa como investigador. Catedrático de la Facultad de Educación de
Cajamarca, ha ejercido además el delicado cargo de Decano, tarea que lo condujo
a lograr la formación idónea de innumerables
docentes,
profesionales muy valiosos para nuestro país.
Pero la
contribución de Luzmán continúa, en la actualidad labora en la Escuela de Post
Grado de la Universidad Nacional de Cajamarca y es Asesor en temas de
desarrollo y gestión en esta muy
importante región.
Acerquémonos
ahora a la muy valiosa producción
bibliográfica, verdadero aporte intelectual a las letras peruanas y a la
cultura nacional.
1.
LA PRÁCTICA DOCENTE (1970)
2.
LITERATURA INFANTIL (1979)
Coautor
: Saniel Lozano Alvarado
3.
EN BUSCA DE LA PALABRA (1977)
Coautores
: Saniel Lozano Alvarado, Iván León Castro y Jorge Vidal Asencio Sangay
4.
ANTOLOGÍA DE LA LITERATURA INFANTIL
CAJAMARQUINA (1981)
Con
103 páginas, la publicación corresponde a Lluvia Editores y las ilustraciones
al siempre presente Manuel Ibañez Rosazza.
En
el prólogo, el propio autor declara: ”Los
autores consignados son poetas a quienes la realidad les ha entrado por
los sentidos y, en consecuencia, son creadores impactados por su mundo
circundante”.
Especifico que esta antología contiene una muy
bella selección de poesía, de cuento, de leyenda y de teatro.
Destaco
en poesía la selección de textos de líridas como Mario Florián, Oscar Corcuera,
Jorge Díaz Herrera, entre otros
En
cuento: Julio Garrido Malaver, Andrés Zevallos De la Puente, entre otros.
Acertadas
recopilaciones de leyendas como la tan difundida “La pampa de la culebra”
Y,
en teatro,: Jorge Díaz Herrera y Marco
Antonio Corcuera.
Luzman,
con acierto, declara en este su libro que : “Una antología conlleva una serie
de pecados agravantes. Nunca satisface todos los gustos ni todos los criterios,
mucho más cuando en ella no figura la totalidad de los autores que deberían
integrar este grupo selecto".
5.
LITERATURA INFANTIL Y EDUCACÓN (1985)
Coautor:
Saniel Lozano Alvarado
Este libro ,con 219 páginas, al inicio nos
acerca al pensamiento del notable poeta y maestro hindú, Rabindranath Tagore,
quien fundó una escuela ideal –Santiniketán- ; la cita dice : “Para ser maestro
de niños es completamente necesario, olvidar lo que sabemos y que hemos llegado
al término de los conocimientos. Si se quiere ser un verdadero guía de niños,
no hay que pensar en que se tiene más edad, ni que se sabe más, ni nada por el
estilo; hay que ser un hermano mayor, dispuesto a caminar con los niños por la
misma senda del saber elevado y de la aspiración. Y el único consejo que puedo
daros en esta ocasión, si habéis de dedicaros a enseñar a los hijos del Hombre,
es esto: que cultivéis el alma del niño eterno.”
Sobre este libro, Jesús Cabel, anota: “No
existe en la historia de la Literatura Infantil en el Perú, un estudio tan
amplio, documentado y profundo sobre las postulaciones que propugna esta
literatura y su relación directa con la educación.”
“Despertar en la infancia el alto interés por
la belleza de la palabra” es la meta fundamental y que traduce, con fidelidad este libro.
6. POETAS
DE CAJAMARCA (1986)
Con 349 paginas, este libro ha sido hecho por
Imprenta Editora Los Andes .Luzmán declara: “El presente estudio sobre la
poesía cajamarquina abre un nuevo espacio , rescata figuras olvidadas y apunta
peculiaridades – como el sincretismo de las corrientes literarias- que
invalidan los juicios generales sobre el ritmo de nuestro quehacer literario.
Luego afirma : “Poetas de Cajamarca significa
un acto de respeto a la poesía.”
El libro comprende siete capítulos. De un
modo sucinto hago referencia a la temática desarrollada.
1er Capítulo: Albores de la poesía
cajamarquina. Manifestaciones aurorales coincidentes con el movimiento
romántico y la publicación de los primeros periódicos en Cajamarca.
2do Capítulo: El Neoclasicismo, el
Romanticismo y Modernismo en Amalia Puga y Diego Camacho.
3er Capítulo: Los románticos: Pedro
Barrantes, Abelardo Pita, Felipe Alva, Iren Pereyra,
4to Capítulo: La inquietud modernista con
representantes de la talla de Yolanda Westphalen y Mariano Ibérico.
5to Capítulo: Tendencias de vanguardia,
análisis del regionalismo indigenista y del regionalismo cholista. La obra de
Anaximandro Vega
6to Capítulo: Estudio de los poetas más
logrados en esta etapa contemporánea: Mario Florián, Julio Garrido Malaver,
Demetrio Quiroz Malca.
7mo capítulo: los últimos, los nuevos.
“Esta obra –explica el prólogo- no solo
pretende ser la historia de la poesía cajamarquina, sino recogerla a través de
sus más visibles representantes, descubrir además el genuino espíritu
provinciano, abrir el pórtico para ingresar en la heterogeneidad de las
literaturas regionales.”
7.VALLLEJO Y LOS CAJAMARQINOS (1993)
8-EL RELATO HUMORÍSTICO. ACCESO A LA
LECTURA E INTERPRETACIÓN.
Con 118
páginas, este libro fue editado en 1999, encierra en sus páginas el resultado d
una investigación experimental en torno al ejercicio de la Literatura motivada
con el relato breve, ameno y gracioso.
9.MANUEL IBAÑEZ ROSAZZA .PERSONALIDAD,
VIDA Y OBRA (2001)
10. LECTURAS SELECTAS SOBRE CAJAMARCA
(1era edición, 203)
11. MARCO ANTONIO CORCUERA: PRESENCIA EN
LA POESÍA PERUANA
(2005)
Con esa
delicadeza del artista de la palabra que es Luzmán tuvo la gentileza de
enviarme algunos textos narrativos que leí con suma atención y quiero hoy, como
un reconocimiento más a la obra de nuestro escritor, leer el breve comentario
que escribí:
Con
deleite ,leo los textos narrativos de Luzmán Salas y, en sus líneas, creo
reconocer cómo la belleza del paisaje de Cajamarca parece haber dotado de
innumerables virtudes expresivas a su
palabra creativa.
Conmovida,
recorro cada línea de los cuentos, uno a uno: LA LLUVIA TIENE LA CULPA; EL
ARMARIO ; EL ATOLLADERO ; MISTERIO DEL RÏO y DON FERMÍN.
Leo y
vuelvo a leer.
Los textos
atrapan mi atención, me cautivan. Con Aristóteles, en su célebre “Poética”,
podría afirmar que han generado “éleos” en mi particular experiencia como lectora, es decir, que cada relato breve pero
Intenso,
ha conmocionado mi intelecto, mi imaginación y mi afectividad. Especialmente el
relato EL ARMARIO, tal vez por el espíritu romántico que traduce la
protagonista.
Un notorio
sentido del humor invade el suceso que motiva LA LLUVIA TIENE LA CULPA. Luzmán
recurre, con maestría, a lo insólito, a lo inesperado para desencadenar una
situación jocosa para el lector y de pavor para los protagonistas. Excelente,
Luzmán.
El amor
siempre es un tema definitivamente importante porque atañe a lo esencial del
ser humano, de allí que en EL ARMARIO, Luzmán logre sumar al misterio y la
curiosidad, el amor como posibilidad y logra producir un texto que se apropia
de nuestro pleno interés.
La presencia
de seres de la naturaleza, de animales como personajes, denota esa ruralidad
casi implícita en la vida de Cajamarca.
En EL
ATOLLADERO, la trágica escena que comparten la vaca baya y el toro mulato nos
inquieta de tal modo que, sin duda, hubiésemos querido estar allí para
salvarlos. Tal el talento narrativo de Luzmán, capaz de generar tensión y
expectativa.
Las
múltiples historias basadas en creencias, supersticiones y sucesos, casi
siempre ficticios, van de boca en boca y son presentadas en MISTERIO DEL
RÍO a un protagonista viajero que,
ejerciendo el arte de escuchar, se
introduce en el mágico mundo de la tradición oral.
Y,
nuevamente esa notable vena jubilosa y humorística del espíritu cajamarquino,
tan presente en los relatos amenos e impactantes de nuestro autor, se grafica
en la historia de DON FERMÍN. El error que este comete constituye el eje narrativo.
Leer los
cuentos de Luzmán Salas, sin duda, es participar de una verdadera fiesta de la
palabra, de la motivación para llegar sin respiro al final de cada historia y
quedar, finalmente, complacidos, gratificados por tener autores de probado
talento narrativo.
Leer la
obra de Luzmán es formar parte activa de esta sociedad del conocimiento, del
uso sagrado y creativo de la palabra que
siempre acredita lo mejor de nosotros mismos.
Dra. Carlota
Flores Scaramutti de Naveda
ADHESIONES
ADHESIONES A LA INCORPORACION DEL ESCRITOR
LUZMAN SALAS SALAS
La
Academia Latinoamericana de Literatura Infantil y Juvenil y la Academia
Uruguaya de Literatura Infantil y Juvenil adhieren al acto de
incorporación del escritor Luzmán Salas Salas como miembro de número de la
Academia Peruana de Literatura Infantil y Juvenil y, al saludar a los
distinguidos integrantes de la Academia Peruana de LIJ que preside el
prestigioso escritor Dr. Roberto Rosario, reafirman su confianza en que el arte
es el mejor puente para la confraternidad y el entendimiento de los pueblos. Con
un abrazo latinoamericano
Dra. Sylvia Puentes
de Oyenard
Presidenta de la
Academia Latinoamericana de Literatura Infantil y Juvenil
---o---
Salem, Oregón, 23 de abril de 2015
La incorporación del
escritor Luzmán Salas Salas como miembro de número de la Academia Peruana de
Literatura Infantil y Juvenil es un acto de justicia que prestigia a esa
corporación.
Luzmán
Salas Salas es un intelectual que sobresale por sus virtudes como escritor,
profesor y crítico literario. En un país como el nuestro en el que superados
prejuicios virreinales aceptan como “de nivel nacional” solamente a quien vive
en Lima, Salas ha dedicado su vida a mostrar la riqueza cultural de Cajamarca,
en su propia obra y en la de los poetas y escritores a quienes ha estudiado o
prologado.
Salud
y felicito al doctor Roberto Rosario, presidente de la APLIJ, y le deseo éxito
en su importante tarea.
Eduardo González Viaña
Miembro
de número de la Academia Norteamericana de la Lengua Española. Catedrático emérito de Western Oregon University
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